La Catedral de Puno (I)
Christian Reynoso
La Catedral de Puno, cuyo nombre real es Templo de la Inmaculada Concepción y Basílica Menor, probablemente sea el monumento arquitectónico más bello e importante de la ciudad de Puno. Ubicada en la plaza de Armas, en un área de 5390 metros cuadrados, llama enseguida la atención, y, más aún, cuando se observa con detenimiento el frontispicio, rico en ornamentación y tallados en piedra en los que se condensa con maestría una compleja nomenclatura religiosa de carácter occidental y de creencias andinas. Así, la lectura de su iconografía ayuda a comprender el significado, el valor y la estética de este Templo-Catedral.
El libro “Catedral de Puno. Análisis iconográfico” (2018), de Jorge Velásquez Castro (Puno, 1927) y Malena Velásquez Uría (Puno, 1965), ayuda de manera didáctica y gráfica a conocer la iconografía de la Catedral, además de ofrecer datos que hasta hoy ignorábamos o que no han sido tomados en cuenta en otros estudios sobre la Catedral (comentaremos acerca de ellos en la segunda parte de esta columna). El libro brinda también la descripción de los santos, imágenes y pinturas que se encuentran al interior del templo y en el altar mayor. Por último, muestra fotografías en primer plano y de detalle, a cargo del lente de Juan Mercado.
Don Jorge Velásquez, quien es docente de arte, estaba fascinado con la arquitectura virreinal, nos cuenta su hija Malena. “Un domingo vio a un grupo de turistas que buscaban con interés respuestas al significado de los tallados en piedra de la Catedral, y al notar que hacía falta una persona que respondiera esas interrogantes, se decidió a escribir el libro. Pasaba las tardes observando el templo y luego escribiendo los apuntes. Con ese deseo, decidí apoyarlo en la escritura y acabado del libro”.
La construcción de la Catedral empezó en 1669, tras los sucesos de San Luis de Alba, en los que se destruyó la capilla de la Inmaculada Concepción por orden del virrey Conde de Lemus. Luego, arrepentido, Lemus mandó a construir otro templo en la nueva villa de Puno (el que hoy es la Catedral). 40 años después, en 1709, se tenían concluidos los seis arcos del cuerpo del templo. Tuvieron que pasar todavía 48 años más para que, gracias a las donaciones de vecinos y mineros, en 1757, se concluyera la construcción. Además de su historia y significado, tanto don Jorge como Malena coinciden en señalar el carácter de “obra de arte y belleza arquitectónica” de la Catedral. Y estamos de acuerdo.
Escrito por
Escritor y periodista peruano. Magister en Literatura Hispanoamericana. Autor de novelas y libros de investigación y ensayo.