El 29 de agosto de 1975, el general Francisco Morales Bermúdez, entonces premier de Juan Velasco, dio un golpe de Estado en Tacna, justo al día siguiente del aniversario de la Ciudad heroica, lo que hoy se conoce como el “Tacnazo”. Enseguida, Velasco dejó el poder y Morales fue proclamado presidente e inició la llamada Segunda fase del Gobierno Revolucionario de las Fuerzas Armadas, hasta 1980. Velasco lo había iniciado en 1968, tras el golpe que dio a Fernando Belaunde, siendo este el tercer golpe que ocurría en la década del sesenta. Golpe tras golpe, el Perú parecía un ring de box.

Las elecciones presidenciales del 10 de junio de 1962, dieron como resultado de las preferencias a Víctor Raúl Haya de la Torre, Fernando Belaunde y Manuel Odría, pero ninguno alcanzó el tercio del total de votos para ser declarado ganador. Según la Constitución, le tocaba al Congreso designar al nuevo presidente, sin embargo, ya las conspiraciones, conversaciones y negociaciones se habían adelantado entre los líderes y los bloques políticos sin llegar a un acuerdo. El presidente Prado, en Palacio, esperaba con calma de qué manera evolucionaban los hechos. Empezó a correr el rumor de un golpe. Meter caballo.

Ante la desidia del Congreso, las Fuerzas Armadas solicitaron al Jurado Nacional de Elecciones la anulación de los comicios, pero ni siquiera esperaron respuesta. El 18 de julio de 1962 se produjo el “Cuartelazo”, que dejó cuatro copresidentes: una Junta Militar de Gobierno integrada por cuatro comandantes generales, uno de cada arma. Entre ellos, fue el general de división Ricardo Pérez Godoy, presidente del Comando Conjunto, quien asumió la presidencia. Sin embargo, pronto se empezó a creer que no cumpliría el compromiso de convocar a elecciones en el plazo de un año. Su talante y ciertas declaraciones en los medios lo confirmaban.

Poco menos de un año, los belaundistas se aliaron con los militares ante el temor de perder el poder. Así, entre el 2 y 3 de marzo de 1963, se produjo el golpe a Pérez Godoy. Entonces una nueva Junta Militar de Gobierno asumió la dirección del país con el general Nicolás Lindley, quien hizo cumplir las elecciones previstas en las que salió elegido Fernando Belaunde. Cinco años después, el 3 de octubre de 1968, con el escándalo de la llamada Página 11, y a un año de concluir su período, Belaunde tuvo que tomar un avión con destino a la Argentina, tras el golpe que dio el general Juan Velasco. Se volvió a meter caballo. Golpe tras golpe como en un ring de box.